Los fuertes vientos y las altas temperaturas han reavivado las llamas en 13 municipios del departamento cruceño, donde actualmente se registran 28 incendios activos. Este jueves, mientras se desarrollaba el paro movilizado del transporte, llegaron numerosos pedidos de auxilio de distintas zonas afectadas, y las cuadrillas de bomberos que permanecen en algunos lugares trabajaron arduamente para proteger las comunidades.
Los incendios han causado daños significativos en potreros y predios privados. En San Rafael, por ejemplo, se han reportado daños en propiedades agrícolas y ganaderas. El reporte de la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Bosques y Tierra (ABT) indica que, a fecha de 1 de agosto, los incendios afectan a los municipios de Ascensión de Guarayos, Concepción, El Puente, Puerto Suárez, Roboré, San Ignacio de Velasco, San Javier, San José de Chiquitos, San Juan de Yapacaní, San Matías, San Miguel, San Rafael y Yapacaní.
Rubén Darío Arias, presidente del Comité de Gestión del Área Protegida del Valle de Tucabaca, alertó sobre la reactivación del incendio en Roboré. Al mediodía, las llamas, impulsadas por los vientos, se encontraban a solo cuatro kilómetros de la comunidad Naranjo, extendiéndose a ambos lados de la carretera. María del Rosario Rodas Surubí, cacique de Naranjos, informó que una familia de 15 integrantes fue evacuada a la comunidad Candelaria debido a la proximidad del fuego a su vivienda.
En la zona permanecen cuadrillas de bomberos de Direna, del Valle de Tucabaca, así como comunales y militares. Una bombera comentó que el viento está acelerando la propagación del incendio, afectando a otras comunidades. La prioridad es proteger a la población, especialmente en Naranjos, donde el fuego está a solo cuatro kilómetros.
En el sureste, el incendio avanza hacia la comunidad Candelaria y podría alcanzar el municipio de El Carmen Rivero Tórrez, además de encontrarse en la cabecera de San Lorenzo Viejo. Arias señaló que estas son reactivaciones de un incendio grande que ya se había registrado anteriormente.
En la comunidad de El Tuná, en San Javier, las llamas rodearon las casas, causando gran preocupación entre los residentes. Los reportes indican que el fuego en la cabecera San Lorenzo Viejo puede afectar a las comunidades de Quitunuquiña, Yororobá y descender hacia Aguas Calientes.
En Carmen de Limones, cerca del cantón Las Petas en ANMI San Matías, se solicitó ayuda urgente para controlar el avance del fuego. El cacique Luciano Espinoza Soleto lamentó que su vivienda haya sido consumida por las llamas y pidió apoyo, mencionando la falta de asistencia del municipio y la Gobernación.
En San José de Chiquitos, más de 1.500 hectáreas han sido afectadas en Monte Verde, y las llamas han persistido durante 50 días. En San Rafael, el fuego lleva 37 días activo, quemando más de 10.000 hectáreas en Anzaldo, 2.200 hectáreas en la Agrupación de Cortadores de Madera de San Rafael, casi 500 hectáreas en la Agrupación Social del Lugar (ASL) Monte Verde, y cerca de 2.500 hectáreas en la comunidad La Selva. Jorge Vargas, alcalde de San Rafael, destacó la necesidad de visibilidad y apoyo, mencionando que actualmente operan en dos de cinco incendios en progreso y enfrentan dificultades debido al terreno de acceso complicado.
La declaratoria de desastre municipal por sequía e incendios fue emitida el 22 de julio. Vargas informó que, desde la primera etapa, contaron con el apoyo de los bomberos de la Gobernación y ahora con Defensa Civil. Actualmente, están ingresando a la zona este de San Rafael, a El Tuná, donde un frente de fuego amenaza esa comunidad.