La ciudad de Cochabamba se ha unido a los municipios de capitales departamentales que rechazan los resultados del Censo de Población y Vivienda 2024 presentados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). A pocos días de la celebración del aniversario de Cochabamba, el alcalde Manfred Reyes Villa expresó su desacuerdo con las cifras oficiales y presentó los datos de natalidad y crecimiento poblacional recopilados por el propio municipio, señalando incoherencias entre los resultados censales y las tendencias demográficas locales.
Reyes Villa destacó que, según los índices de natalidad, mortalidad y expansión territorial, la población de Cochabamba debería acercarse al millón de habitantes, mientras que los resultados del censo no reflejan esta realidad. El alcalde anunció que Cochabamba no participará en ninguna reunión con autoridades nacionales para revisar datos generales. En su lugar, hizo un llamado al INE para sostener una reunión técnica en la que se pueda analizar específicamente el caso de la ciudad y llegar a conclusiones basadas en datos concretos.
“Existen incoherencias entre el resultado del proceso censal y el crecimiento poblacional registrado. No vamos a asistir a ninguna reunión para escuchar datos generales, pedimos una reunión técnica de análisis del caso de Cochabamba”, publicó Reyes Villa en sus redes sociales.
Este rechazo de Cochabamba se suma al de los municipios urbanos de La Paz, El Alto y Santa Cruz, que también han cuestionado los datos del censo, a pesar de que el INE ha expresado su disposición a revisar la información y someterla a cualquier análisis técnico necesario. En ese contexto, el director del INE, Humberto Arandia, se reunió este martes con la alcaldesa de El Alto, Eva Copa, quien también ha expresado su desacuerdo con los resultados censales, pero recibió el compromiso de Arandia de asistir a una reunión con la Asamblea de la Alteñidad después del 16 de septiembre para discutir los datos en detalle.
Copa criticó que los resultados del censo indican que El Alto recibirá menos recursos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), perdiendo alrededor de 25 millones de bolivianos, aunque ganará 5 millones adicionales debido al incremento de 36.500 habitantes que reflejaron los datos censales. Esta situación, según la alcaldesa, genera una disconformidad que afecta la planificación financiera de la ciudad.
Finalmente, Copa explicó que, pese a las críticas, el municipio de El Alto se ve obligado a presentar su Plan Operativo Anual (POA) con los datos proporcionados por el INE para garantizar la ejecución de proyectos y el presupuesto asignado. “Lamentablemente, se nos está imponiendo una jugada que no creemos correcta ni ética, pero debemos enviar el POA para asegurar la ejecución de nuestro presupuesto”, concluyó la alcaldesa alteña.
