El expresidente Evo Morales ha solicitado a las organizaciones del Pacto de Unidad reconsiderar el bloqueo indefinido de caminos que llevan a cabo desde hace 19 días. En un anuncio reciente, Morales informó que iniciará una huelga de hambre, exigiendo que el Gobierno establezca mesas de diálogo para tratar la complicada situación económica y responder a las demandas de los sectores movilizados.
Durante su declaración pública, Morales enfatizó el impacto negativo que las protestas están teniendo en la economía del país, señalando que las demandas sociales, que incluyen el aumento de los precios de medicamentos, combustibles y productos de la canasta básica, afectan directamente a las familias bolivianas. Subrayó la necesidad de una respuesta gubernamental ante estas preocupaciones.
Morales recordó que en un ampliado nacional el 3 de septiembre, donde participaron alrededor de 6,000 simpatizantes, se había decidido organizar una marcha pacífica hacia La Paz en lugar de mantener los bloqueos, en consideración a las efemérides de Cochabamba y Santa Cruz. La movilización de septiembre se centró en exigir su reconocimiento como líder del MAS y candidato único para las elecciones de 2025.
La situación se complicó cuando Morales fue citado a declarar ante la Fiscalía de Tarija por un caso de “estupro agravado” y trata de personas. Aunque no se presentó, sus bases iniciaron bloqueos en Cochabamba el 14 de octubre, con la demanda de que se eliminen los cargos en su contra. Morales reconoció que estas acciones han tenido un efecto perjudicial en la economía nacional, afectando tanto al campo como a la ciudad.
Para evitar mayores conflictos y daños económicos, pidió un cuarto intermedio en los bloqueos, mientras espera que el Gobierno acceda a sus demandas. “He decidido iniciar una huelga de hambre hasta que el Gobierno acceda a establecer mesas de diálogo”, anunció, solicitando la participación de organismos internacionales como mediadores para facilitar un diálogo transparente y efectivo.
La huelga se llevará a cabo en la sede de la radio Kawsachun Coca, en Lauca Ñ, que es considerada el cuartel general de las Seis Federaciones y un bastión del MAS-Evista. Esta declaración se produjo en un contexto de tensión, mientras una fuerza combinada de policías y militares intentaba despejar los cortes de ruta realizados por los seguidores de Morales en la ruta que une Cochabamba con el occidente del país.
El presidente Luis Arce informó que, en los enfrentamientos con los seguidores de Morales, 61 policías resultaron heridos. En medio de este clima de conflicto, Morales reiteró la importancia de buscar soluciones pacíficas, sugiriendo que “nuestra prioridad debe ser construir puentes”. Este contexto de tensión incluso llevó a la postergación de las elecciones judiciales por dos semanas, ahora programadas para el 15 de diciembre.