La Federación de Cooperativas Mineras Auríferas del Norte de La Paz (Fecoman) ha declarado una situación de emergencia en el sector debido a la falta de entrega de los cupos de diésel comprometidos por las autoridades. Según el presidente de Fecoman, Efraín Silva, los mineros llevan más de una semana sin recibir las dotaciones diarias de combustible que les habían sido asignadas, las cuales consisten en cuatro cisternas diarias. Esta falta de suministro ha provocado una parálisis en las operaciones mineras, afectando gravemente a la industria.
Silva expresó que, ante esta situación, los mineros están dispuestos a salir a las calles para exigir el abastecimiento necesario de diésel. Además, denunció que algunos funcionarios están impidiendo la entrega del combustible, lo que agrava aún más la crisis. A pesar de los esfuerzos por parte de los mineros para adquirir combustible por otros medios, se han encontrado con problemas de distribución, además de la falta de dólares que dificulta las importaciones directas de combustible.
Por su parte, el presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, reconoció que existen dificultades logísticas en la importación de diésel, debido a factores externos como los bloqueos de caminos en Yacuiba y Yapacaní, que han obstaculizado el flujo de combustible hacia el país. Dorgathen explicó que, aunque el 85% del diésel necesario para Bolivia se importa, las plantas en Paraguay, Argentina y Chile también deben atender las necesidades de sus respectivos mercados internos, lo que complica el suministro exclusivo para Bolivia. Ante esto, destacó que la estatal petrolera está trabajando arduamente en mejorar la logística para evitar que estos problemas persistan y garantizar la llegada continua del diésel a las cooperativas mineras.