La Fiscalía boliviana inició un proceso penal por el delito de sustancias controladas contra Sergio Luiz de Freitas Filho, alias “Mijão”, considerado jefe del Primer Comando Capital (PCC) de Brasil, tras confirmarse que el narcotraficante residió en lujosas mansiones de Santa Cruz de la Sierra, amparado en documentos falsos.
El caso salió a la luz después de un reportaje de la cadena O Globo, que reveló que el capo brasileño vivió en al menos seis residencias de alto valor en la capital cruceña, con alquileres que alcanzaban los 5.000 dólares mensuales, rodeado de lujos y con identidades falsas.
Tras la difusión del reportaje, la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) activó de inmediato allanamientos en varios inmuebles que Mijão habría ocupado en pasados años.
El coronel Ángel Morales, director nacional de la Felcn, explicó que se trabaja en coordinación con países vecinos, especialmente Argentina, ya que existen indicios de que el narcotraficante pudo huir hacia ese territorio.
“Los domicilios allanados, que salieron en la prensa, fueron habitados en 2017 y 2019 por esa persona. Ahora pertenecen a otras personas, a quienes se tomó declaraciones”, señaló Morales, precisando que se continúa con otros operativos en distintos puntos de Santa Cruz.
El coronel Juan Carlos Bazoalto Torrez, director nacional de Interpol Bolivia, informó que la notificación roja contra Mijão fue recibida el 4 de julio y se emitió de inmediato una circular a Migración y a todas las direcciones departamentales de la Policía.
Sin embargo, aclaró que hasta el momento no existen registros de ingreso o salida del capo en territorio boliviano. Por ello, se solicitó a Interpol Brasil información complementaria y un mandamiento de detención preventiva con fines de extradición, para que, en caso de ser hallado en Bolivia, pueda ser puesto ante un juez.
El fiscal general del Estado, Róger Mariaca, confirmó que sobre el jefe del PCC pesan al menos siete procesos en Brasil, e incluso ya fue condenado a ocho años y dos meses de prisión en uno de esos casos.
La Fiscalía boliviana subrayó que el proceso abierto en el país responde al compromiso de combatir el crimen organizado transnacional y que la captura de Mijão es una prioridad para las autoridades de seguridad.