En el marco del Foro del Consejo Económico y Social de la 80ª Asamblea General de las Naciones Unidas, celebrado este miércoles en Nueva York, el presidente de Bolivia, Luis Arce Catacora, defendió los intereses de los Países en Desarrollo Sin Litoral (PDSL), remarcando que no buscan favores, sino igualdad de condiciones para desplegar todo su potencial.
“Los países en desarrollo sin litoral no pedimos caridad ni tratamiento especial, simplemente pedimos un tratamiento justo. No buscamos privilegios, buscamos igualdad de oportunidades para desarrollar nuestro potencial”, afirmó el mandatario boliviano en su intervención, marcando un tono firme y reflexivo ante la comunidad internacional.
Arce destacó que el Programa de Acción de Awasa (PAA) constituye una hoja de ruta clara y estratégica para enfrentar los desafíos de estas naciones, señalando que existe voluntad política de los gobiernos y el apoyo del Sistema de Naciones Unidas para avanzar en la implementación de sus lineamientos.
El presidente instó a que todos los Estados Miembros de la ONU brinden un apoyo sostenido a los PDSL, recordando que más de 560 millones de personas viven en países sin litoral y que esta década debe ser “verdaderamente transformadora” para ellos.
“Juntos podemos lograr que estar Sin Litoral no signifique quedarse atrás en un futuro más próspero, sostenible, inclusivo y resiliente”, reflexionó el jefe de Estado.
En su discurso, Arce subrayó la importancia de la Oficina del Alto Representante para los Países Menos Adelantados, los PDSL y los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo, que durante más de dos décadas ha brindado apoyo técnico y coordinación especializada.
Asimismo, agradeció el compromiso del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien garantizó que las reducciones presupuestarias en el marco de la reforma de la organización fueron “cuidadosamente calibradas”, de modo que no afecten el respaldo a los países más vulnerables.
Arce cerró su intervención con una reflexión sobre el rol estratégico de estas naciones:
“Cuando los Países Sin Litoral prosperan, contribuyen al crecimiento económico global, a la estabilidad regional y al desarrollo sostenible”.
De esta manera, el mandatario boliviano insistió en que el futuro de los PDSL no debe estar marcado por limitaciones geográficas, sino por la oportunidad de insertarse plenamente en un mundo más equitativo e inclusivo.