Tras la inspección ocular realizada en el colegio donde el pasado 21 de septiembre murieron dos jóvenes a consecuencia de una avalancha humana, la Fiscalía informó este martes que se convocará a declarar a entre 12 y 15 personas más. La investigación reveló serias irregularidades, entre ellas que el aforo del lugar era para un máximo de 500 personas, pero se habrían vendido cerca de 4.000 entradas.
El fiscal de materia, Alex Vargas, señaló que durante la inspección se recogieron varios elementos que servirán como prueba y que ya se citó a algunas personas, aunque se prevé ampliar las convocatorias. “Lo que conocemos es que se han vendido alrededor de 4.000 entradas, distribuidas tanto en componentes de la banda, rompe filas y también en alumnos del colegio”, detalló la autoridad.
Consultado sobre la capacidad real del recinto, Vargas explicó: “Habiendo ingresado y conocidos los ambientes, podemos advertir que la capacidad no supera de las 400 a 500 personas paradas”.
Durante la inspección, no estuvo presente el vocalista del grupo musical que actuó esa noche y que, según las investigaciones preliminares, habría originado una de las avalanchas. En su lugar, envió a dos abogados, quienes no justificaron documentalmente la ausencia del artista.
Los padres de las dos víctimas fatales asistieron al procedimiento judicial, pero debido a su estado de salud y la carga emocional se descompensaron, por lo que no pudieron participar plenamente de la inspección.
El fiscal precisó que, por el momento, la investigación está centrada en los padres de familia y el comité organizador del evento. No obstante, no se descarta incluir al centro de estudiantes más adelante, aunque se tomará en cuenta que, por tratarse de menores de edad, están amparados por el Código Niña, Niño y Adolescente.
Asimismo, Vargas no descartó nuevas aprehensiones ni futuras citaciones a otras personas vinculadas con la tragedia. En esa línea, adelantó que la directora y el plantel administrativo del colegio sí tenían conocimiento de la realización del evento y de la venta masiva de entradas.
Finalmente, la Fiscalía cuestionó la falta de medidas de seguridad durante el evento, señalando que no se contó con personal suficiente, ni con una ambulancia o equipos médicos que garanticen la integridad de los asistentes, a pesar de tratarse de un espectáculo masivo que congregó a miles de personas.