La Federación Departamental Única de Trabajadores Campesinos de La Paz “Túpac Katari”, bajo el liderazgo de su secretario ejecutivo, David Mamani Quispe, llevó a cabo un ampliado el pasado sábado en la ciudad de El Alto, en el cual se adoptaron varias resoluciones de gran impacto político. Entre los puntos más destacados, la federación exigió la renuncia inmediata del presidente del Estado, Luis Arce Catacora. Según el dirigente Mamani, esta demanda se fundamenta en tres acusaciones principales: la división de múltiples organizaciones sociales a nivel nacional, la incapacidad demostrada en la gestión pública durante sus cuatro años de mandato, y el deterioro de la economía nacional bajo su administración.
Mamani explicó que, tras la renuncia de Arce, el Órgano Legislativo debería convocar a nuevas elecciones nacionales con la mayor brevedad posible. La idea es que un nuevo gobierno pueda implementar políticas de ajuste necesarias para enfrentar la crisis económica que actualmente atraviesa Bolivia.
En el mismo ampliado, se resolvió la organización de una “gran marcha” de protesta programada para el 2 de septiembre. Esta marcha tiene como objetivo principal la recuperación de la sede sindical ubicada en la zona de San Pedro de la ciudad de La Paz, un espacio que, según los líderes, les pertenece y que desean retomar.
Otra medida adoptada fue la expulsión de aquellos dirigentes campesinos que han sido acusados de corrupción y de haberse vendido al gobierno de Luis Arce. Esta decisión subraya el descontento y la desconfianza dentro de las filas de la federación hacia ciertos líderes, quienes son vistos como traidores a los intereses de su organización.
Además, el ampliado sirvió para consolidar un pacto de unidad con diversas organizaciones de las 20 provincias del departamento de La Paz, así como a nivel nacional. Mamani destacó la necesidad de preparar una agenda nacional que permita hacer frente a la crisis diaria que afecta a la población.
Sobre la cuestión de la afiliación política, Mamani aclaró que su organización no está alineada con ningún grupo del Movimiento Al Socialismo (MAS), a pesar de que muchos en el pasado lo han acusado de estar vinculado al evismo, la facción que apoya al expresidente Evo Morales. Mamani enfatizó que su federación no permitirá la injerencia de ninguna fuerza política partidaria, destacando su autonomía y rechazo a cualquier manipulación externa.