El presidente Luis Arce realizó un inesperado viaje a Kazán, Rusia, para participar en la XVI Cumbre de los BRICS, donde se reunirán representantes de 30 países. La visita, que no estaba en la agenda oficial, se lleva a cabo en un momento crucial, ya que Arce tiene programada una reunión bilateral con el presidente ruso, Vladimir Putin. Este viaje se produce en un contexto donde el mandatario había eludido anteriormente participar en cumbres internacionales de gran relevancia, como la reunión anual de la ONU y la toma de posesión de la nueva presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
La viceministra de Comunicación, Gabriela Alcón, confirmó la salida del presidente, destacando que el viaje fue una respuesta a una invitación directa de Putin para asistir a la cumbre. Arce partiría de Bolivia el martes y su retorno está programado para el viernes. La cumbre, que se celebrará del 22 al 24 de octubre, se presenta como una oportunidad significativa para establecer relaciones internacionales y buscar beneficios económicos para Bolivia, según afirmó el presidente en un mensaje en sus redes sociales.
En un acto protocolar realizado poco antes de su partida, Arce traspasó el mando al vicepresidente David Choquehuanca, quien luego participó en la posesión del nuevo Fiscal General del Estado. En su declaración, Arce enfatizó la importancia de la cumbre en el contexto de un nuevo orden mundial más equilibrado y justo, lo que refleja su interés por fortalecer la posición de Bolivia en la esfera internacional.
