En un operativo que parece sacado de una película de acción, los presuntos sicarios del Capitán José Carlos Aldunate Meneses lograron escapar de Santa Cruz en una avioneta incautada al narcotráfico, utilizando identidades falsas. El vuelo habría partido del aeropuerto El Trompillo apenas una hora después del violento asesinato del militar, ocurrido en circunstancias aún bajo investigación.
- Según informes, la avioneta habría salido del Hangar 108 con seis personas a bordo: dos pilotos y cuatro pasajeros, todos con identidades falsas. El plan de vuelo indicaba un trayecto Santa Cruz-Trinidad-Santa Cruz, pero la aeronave nunca llegó a su destino. En su lugar, se desvió hacia la zona fronteriza entre Bolivia y Brasil, y hasta el momento no ha regresado a El Trompillo.
Este hecho ha levantado serias interrogantes sobre la posible complicidad de funcionarios de la Dirección de Reconversión de la Aviación Civil Boliviana (DIRCABI), quienes habrían autorizado el uso de la avioneta incautada. Las autoridades aún no se pronuncian, mientras la investigación intenta esclarecer cómo se coordinó esta fuga y quiénes están detrás de este audaz escape que ha dejado al descubierto fallas críticas en los controles de seguridad.
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