Santa Cruz está atravesando una crisis sanitaria debido al acelerado aumento de los casos de influenza, con un total alarmante de 1.268 contagios registrados hasta el 17 de abril de 2024. De este número, 264 casos se confirmaron solo en la última semana, lo que refleja un claro y preocupante repunte de la enfermedad. La rápida propagación del virus ha puesto en alerta a las autoridades de salud, quienes aseguran que el número de contagios sigue en ascenso.
Dorian Jiménez, jefe de Epidemiología del Servicio Departamental de Salud (Sedes), detalló que en las últimas semanas los casos de influenza han ido aumentando significativamente. En la semana 13, se registraron 117 casos; en la semana 14, la cifra subió a 306; en la semana 15, los contagios alcanzaron los 474; y en la actual semana, aún sin concluir, ya se han reportado 264 casos. Este patrón de crecimiento refleja la gravedad de la situación y la rápida propagación del virus en la población.
Jiménez señaló que una de las principales razones del incremento de contagios es la falta de cumplimiento de las recomendaciones sanitarias por parte de la población. «Los contagios siguen aumentando porque la gente no está acatando las medidas de prevención», advirtió. Esto pone especialmente en riesgo a los grupos más vulnerables, como los adultos mayores y las personas con enfermedades preexistentes.
El impacto de la enfermedad es aún más dramático cuando se analizan las víctimas fatales. Hasta el momento, el Comité Científico del Sedes ha confirmado 10 muertes por influenza, mientras que otras ocho muertes están bajo investigación. La mayoría de las personas que han fallecido son adultos mayores de 60 años, con enfermedades preexistentes y que no se habían vacunado. En un caso particularmente preocupante, un niño que falleció en el Hospital de Niños está siendo investigado, ya que la causa de su muerte aún no ha sido confirmada.
En respuesta a este aumento de casos y fallecimientos, Jiménez hizo un llamado urgente a la población para que no subestimen los síntomas respiratorios. «Es fundamental acudir al centro médico más cercano tan pronto como se presenten síntomas como fiebre, tos o dolor de garganta», recomendó. Además, alertó sobre los riesgos de la automedicación y de asistir a lugares públicos, como escuelas y lugares de trabajo, cuando se presentan estos síntomas, lo que podría propagar la enfermedad aún más. También instó a la población a usar mascarillas de forma constante para minimizar el riesgo de transmisión.
El jefe de Epidemiología también hizo un llamado a los padres para que no envíen a sus hijos a clases si presentan síntomas de la enfermedad. A partir de la próxima semana, tras el feriado de Semana Santa, se reforzarán los filtros escolares para detectar rápidamente a los niños con posibles síntomas y enviarlos de vuelta a casa para recibir atención médica adecuada.
En cuanto a la vacunación, Jiménez informó que se espera el envío de las dosis contra la influenza por parte del Ministerio de Salud en las próximas dos semanas. Recordó que la vacuna se aplica una vez al año y que quienes ya se vacunaron en 2024 deben volver a inmunizarse. «Es crucial que, cuando las vacunas lleguen, la gente acuda de inmediato a los puntos de vacunación», subrayó. Insistió en que la prevención a través de la vacunación y el cumplimiento de las medidas de higiene y aislamiento es clave para frenar la propagación de la influenza y evitar un mayor número de contagios y muertes.