La tensión social se incrementa en el oriente boliviano con la expansión del bloqueo en la carretera Bioceánica, protagonizado por comunidades del pueblo indígena ayoreo. La medida de presión, que se inició en la madrugada de este jueves en las localidades de Yacuses y Buen Samaritano, se extendió horas más tarde hasta el municipio de San José de Chiquitos, profundizando el corte de la ruta internacional.
La protesta comenzó alrededor de las 15:00 en San José, cuando los manifestantes instalaron puntos de bloqueo con troncos, piedras y otros objetos para impedir el tránsito vehicular. Desde las primeras horas de la jornada, la carretera ya se encontraba obstruida en los sectores de Yacuses y Buen Samaritano, generando serios perjuicios al transporte y a los viajeros que utilizan esta vía estratégica para la conexión con el Brasil.
El origen del conflicto radica en una serie de denuncias de presunta corrupción que pesan sobre la asambleísta departamental Giliana Etacore, representante del pueblo ayoreo ante la Asamblea Legislativa Departamental (ALD) de Santa Cruz. Los manifestantes acusan a Etacore de malversar recursos públicos y de incurrir en contrataciones irregulares cuando estuvo a cargo de la Dirección de Pueblos Indígenas dentro de la ALD.
Ante la falta de respuesta de las autoridades competentes, las comunidades exigen el inicio inmediato de un proceso de revocatorio en contra de la legisladora. Consideran que la permanencia de Etacore en el cargo es insostenible y que su gestión ha dañado la credibilidad de la representación indígena dentro del órgano legislativo departamental.
Rocío Picaneré, vocera de la movilización, informó que la medida de presión es de carácter indefinido y que, en las próximas horas, se espera que se sumen más comunidades originarias de las regiones de Cuatro Cañadas y Taperas. “Esto recién comienza y no vamos a levantar el bloqueo hasta que el Tribunal Electoral atienda el pedido de revocatoria de la asambleísta Giliana Etacore y la Gobernación se pronuncie sobre las denuncias de corrupción que presentamos el pasado 30 de enero”, declaró.
Mientras tanto, el flujo de transporte en la carretera Bioceánica permanece completamente paralizado en los puntos de bloqueo. Transportistas, pasajeros y empresarios expresaron su preocupación por las pérdidas económicas que genera el corte de esta ruta clave para el comercio y el turismo.
