A raíz de una denuncia presentada por vecinos del centro de la ciudad, autoridades municipales y la Policía realizaron un operativo conjunto en el que constataron el completo desmantelamiento del edificio Bolívar, una estructura abandonada ubicada sobre la avenida Uruguay, entre las calles Aroma y Quijarro. El inmueble, según los informes, ha sido ocupado por personas en situación de calle que, además de usarlo como refugio, lo han destruido para extraer y vender materiales.
El subalcalde del distrito municipal 11, Rolando López, quien encabezó el operativo, detalló que el daño causado es prácticamente total. “Se sacaron los cables, los térmicos, soquetes, la instalación hidrosanitaria, puertas, marcos, ventanas, aires acondicionados e incluso azulejos”, afirmó. En el lugar ahora solo quedan escombros y restos de las pertenencias de quienes ingresan por las noches.
Durante la inspección, se evidenció que estos individuos utilizan el lugar principalmente en horas de la tarde y la noche, lo que ha incrementado la preocupación de los vecinos. Según relatan, desde este edificio salen personas que cometen robos y otros delitos en las calles aledañas, generando un creciente sentimiento de inseguridad en la zona.
El subalcalde López también advirtió que esta situación no es un caso aislado. “Hay varios inmuebles en las mismas condiciones de abandono y deterioro en el centro citadino, pero para intervenir se requiere la denuncia formal de los propietarios”, explicó. Esta limitación legal impide que las autoridades actúen de oficio, a menos que exista una solicitud expresa de los dueños.
Los vecinos del área afectada han solicitado el inmediato desalojo de las personas que se han asentado en el edificio, y piden mayor presencia policial para evitar que se sigan utilizando estos espacios como focos de delincuencia.