La Maternidad Percy Boland de Santa Cruz se vio envuelta en una controversia luego de que una familia denunciara haber recibido el cuerpo de un recién nacido varón, cuando en el hospital les informaron inicialmente que su bebé, una niña, había fallecido al nacer. Ante el reclamo público, el director del centro hospitalario, Mario Herbas, negó categóricamente que se haya producido un cambio de cadáver y explicó que se trató de un error en la transcripción del sexo del bebé en el certificado de defunción.
El caso fue expuesto el miércoles, lo que motivó al Servicio Departamental de Salud (Sedes) a activar de inmediato una investigación interna para esclarecer los hechos y determinar si existió negligencia o irregularidades por parte del personal de salud. La denuncia de la familia generó conmoción, ya que implicaba la posibilidad de que el cuerpo entregado no correspondiera al hijo de la madre afectada.
Según el director Mario Herbas, el error se produjo únicamente en la etapa de documentación, específicamente al momento de llenar el certificado de óbito. Afirmó que desde un inicio el personal médico que atendió el parto registró correctamente que el recién nacido era un varón, y que esta información fue corroborada por el neonatólogo presente durante el procedimiento.
“Lo que hubo fue un error en la transcripción del certificado de óbito. Primero atendemos la vida del recién nacido y luego se realiza el trámite documental. El error fue netamente informativo, no hubo cambio de cuerpo”, aseguró Herbas en declaraciones a la prensa.
Para despejar cualquier duda y garantizar la transparencia del proceso, el hospital tomó la decisión de realizar una prueba genética de ADN, utilizando muestras tanto de la madre como del bebé fallecido. Herbas explicó que esta medida busca confirmar con certeza biológica que el cuerpo entregado corresponde efectivamente al hijo de la mujer afectada. Los resultados de la prueba genética serán conocidos el sábado 28 de junio.
La dirección del hospital reiteró su compromiso con la atención digna y profesional de los pacientes, y lamentó el malestar generado por el error administrativo. Mientras tanto, el Sedes continuará con la indagación para determinar posibles responsabilidades y establecer protocolos más rigurosos que eviten incidentes similares en el futuro.
