El presidente de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF), Fernando Costa, informó que la institución iniciará acciones legales contra “personas y dirigentes” que, según afirma, estarían encabezando campañas de desprestigio en contra de su gestión. Estas declaraciones surgieron luego de las fuertes críticas que circularon en las últimas horas debido a la polémica arbitral registrada en el partido entre Always Ready y Bolívar, encuentro que estuvo marcado por la anulación de un gol a favor del conjunto paceño por una presunta mano.
Costa aseguró que la FBF ha recibido información y denuncias que apuntan a un movimiento organizado en redes sociales destinado a afectar la credibilidad de la institución. “Hay una campaña deliberada de desprestigio a través de redes sociales y guerreros digitales. Tenemos información y denuncias que nos han llegado. Vamos a pedir al staff jurídico que pueda oficializar una demanda penal porque esto es un delito informático”, explicó. Añadió que solicitarán al Ministerio Público que investigue estos hechos con el fin de “desmantelar a estas bandas dedicadas a difamar, desprestigiar y delinquir”.
El titular federativo señaló que detrás de estas acciones estaría una “banda de guerreros digitales” presuntamente liderada por el expresidente de Always Ready. Asimismo, lamentó que algunos dirigentes de clubes contribuyan a “devaluar” el torneo con declaraciones realizadas tras el polémico encuentro, haciendo alusión directa a Marcelo Claure, presidente de Bolívar, quien expresó su molestia por el gol anulado.
“Preocupa que dirigentes, al calor del momento, pretendan desprestigiar a directivos y tratar de devaluar el torneo y el fútbol boliviano. No lo vamos a tolerar y tomaremos las medidas que la norma deportiva amerita”, afirmó Costa, subrayando que la federación actuará decididamente para preservar la integridad del campeonato.
Por su parte, Andrés Costa, presidente de Always Ready, también se refirió a la controversia y dejó entrever que Marcelo Claure sería el principal impulsor de las supuestas campañas de desprestigio contra la FBF. “A mí más asco me da tener que pagar a gente para tratar de sembrar pruebas. Una persona que paga y es grabada para perjudicar o implantar algo que pueda beneficiar a sus intereses y que hasta ahora no tiene sanción”, expresó, elevando aún más la tensión entre dirigencias.
