El trágico destino de José A. P. M., un joven panadero de 26 años, ha conmocionado a la comunidad tras su fallecimiento a causa de las graves heridas sufridas durante un acto de brutalidad perpetrado por Miguel T. V., de 36 años. Este lamentable episodio se desencadenó debido a las acusaciones infundadas de Miguel, quien sospechaba que José mantenía una relación sentimental con su esposa.
José, conocido como un joven trabajador y dedicado, fue invitado por Miguel a su domicilio el sábado 25 de mayo bajo el pretexto de hablar sobre su esposa. Sin embargo, lo que comenzó como una conversación se convirtió en una pesadilla cuando Miguel lo golpeó y lo llevó al sótano de su casa, donde lo sometió a tortura física y psicológica.
En un acto de extrema violencia, Miguel roció a José con gasolina y le prendió fuego, dejándolo con el 72% de su cuerpo quemado. A pesar de las terribles heridas, José logró salir a la calle en busca de ayuda, pero el daño ya estaba hecho. Su cuerpo gravemente quemado requería atención médica urgente.
José fue ingresado al hospital Santa Bárbara de Sucre el domingo pasado, donde luchó por su vida durante seis días en la Unidad de Terapia Intensiva (UTI). Sin embargo, el sábado, a las 14:00 horas, su corazón dejó de latir, y la tragedia se consumó.
Los informes médicos revelaron que José falleció a causa de un paro cardíaco, producto de las graves quemaduras que afectaron su cuerpo, provocando un “estado muy crítico, distrés respiratorio y una falla renal aguda”.
La comunidad y la familia de José han expresado su indignación y dolor por este acto atroz. Liz P., hermana de la víctima, describió a José como un joven trabajador y tranquilo, conocido por su dedicación en la panadería familiar y su pasión por la gastronomía. Ahora, claman por justicia y esperan que se investigue no solo a Miguel, sino también a otros implicados, incluida la esposa del agresor.
El director del hospital Santa Bárbara, David Gumiel, confirmó que José falleció debido a “fallas multifuncionales”, lo que indica la gravedad de las lesiones sufridas.
Con la muerte de José, el caso ha tomado un nuevo giro, y Miguel T. V. enfrentará un proceso judicial por el crimen del joven panadero, un acto que ha conmocionado a toda la sociedad y ha puesto de manifiesto la importancia de luchar contra la violencia y la injusticia.