Este miércoles, el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, reiteró la importancia de reconocer una crisis para poder resolverla adecuadamente, y criticó duramente al presidente Luis Arce por lo que considera una falta de atención y acción frente a la crisis actual. Camacho argumentó que la actitud del presidente demuestra un enfoque en la perpetuación en el poder en lugar de abordar los problemas urgentes que enfrenta el país.
“El principio para solucionar una crisis es reconocerla, hacer un diagnóstico responsable, convocar a todos los sectores sin hacer cálculos políticos y trabajar una agenda pensando en la gente y sus necesidades”, expresó Camacho a través de sus redes sociales. Esta declaración subraya su creencia de que una respuesta efectiva a la crisis debe comenzar con un reconocimiento honesto y un enfoque inclusivo.
Camacho instó nuevamente al presidente Arce a apoyar el «modelo productivo cruceño», argumentando que este modelo es esencial para comenzar a superar la crisis económica que afecta al país. “El país se lo está diciendo ‘a gritos’, atienda la crisis, salga de su palacio. Pero usted no escucha porque solo piensa en cómo prorrogarse en el poder”, agregó, criticando la aparente desconexión del presidente con las preocupaciones y necesidades de la población.
Estas declaraciones de Camacho se producen en un contexto de creciente preocupación económica, especialmente tras la reciente decisión de la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) de imponer una banda de hasta el 20% en las comisiones por transacciones internacionales realizadas en monedas distintas al dólar. Camacho advirtió que esta medida podría agravar aún más la situación económica del país.
“Ante la falta de dólares, ASFI impone nuevas comisiones de 20% para giros en otras monedas. Los bancos siguen ajustando y reduciendo la disponibilidad del dinero para uso en el exterior. Esto va a encarecer aún más la importación de productos e insumos para la producción y el consumo, el dinero ya no alcanza porque está perdiendo su valor, las empresas están reduciendo personal y el desempleo va aumentando”, indicó Camacho, reflejando la creciente preocupación por la capacidad del país para manejar su economía bajo las nuevas regulaciones.
Camacho describió la situación como un «círculo vicioso» que está asfixiando el sistema económico, generando desconfianza y desacelerando aún más la economía. “Con restricciones, multas y acoso, lo único que se está logrando es que el sistema se vaya asfixiando, que la desconfianza aumente y que la economía se siga desacelerando”, concluyó, enfatizando la necesidad de un enfoque más efectivo y menos restrictivo para abordar los problemas económicos del país.