En un acto protocolar celebrado este martes en la ciudad de La Paz, en conmemoración anticipada a los 216 años de la gesta libertaria del departamento paceño, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Romer Saucedo, lanzó una dura advertencia contra quienes pretendan instrumentalizar la justicia con fines personales o políticos. Refiriéndose al denominado “caso Consorcio”, Saucedo dejó en claro que quienes atenten contra la independencia del Órgano Judicial no deberán esperar impunidad: “Lo que les va a esperar seguramente no es el retorno a su casa, ya hemos dado ejemplo de lo que les pasa”, sentenció durante su discurso.
El caso Consorcio, que salió a la luz el mes pasado, reveló un intento por parte de un grupo de funcionarios públicos, encabezados por el entonces ministro de Justicia, César Siles, de destituir a la magistrada del TSJ por La Paz, Fanny Coaquira. Según las denuncias, esta movida buscaba tomar el control del Tribunal Supremo mediante la imposición de magistrados suplentes afines, debilitando así la estructura judicial del país.
Romer Saucedo, quien asumió la presidencia del TSJ tras las recientes elecciones judiciales que renovaron a siete de los nueve magistrados, reafirmó el compromiso del nuevo órgano con la defensa de la independencia institucional y la erradicación de viejas prácticas de manipulación. “Algunas personas estaban acostumbradas a manipular, a someter, a instrumentalizar la justicia para sus afanes personales. Eso se acabó”, afirmó de forma tajante.
Durante su intervención, Saucedo enfatizó que el Órgano Judicial ya no tolerará interferencias externas ni intentos de cooptación desde el poder político. “Aquel que intente nuevamente instrumentalizar la justicia, juzgar para sus intereses personales, es mejor que mida bien sus acciones”, advirtió frente a un auditorio compuesto por autoridades nacionales, departamentales y locales, reiterando que el Tribunal está preparado para actuar con firmeza ante cualquier amenaza.
La magistrada Fanny Coaquira, quien también estuvo presente en el acto, fue mencionada como la primera en la lista de funcionarios judiciales que habrían sido blanco del intento de remoción. Según las autoridades del Órgano Judicial, se planeaba una intervención progresiva que habría terminado por someter al TSJ mediante designaciones encadenadas de suplentes, debilitando la institucionalidad y sometiéndola a intereses ajenos a la legalidad.
Con voz firme, Saucedo cerró su pronunciamiento con una declaración categórica: “Que no quepa ninguna duda de que no nos tiembla el pulso para mantener la independencia de nuestro Órgano Judicial”.
Durante el mismo acto, el alcalde de La Paz, Iván Arias, aprovechó la presencia del presidente del TSJ para realizar una solicitud especial. Pidió a las autoridades judiciales un gesto humanitario en el marco del Bicentenario de Bolivia, solicitando que se haga justicia con la exministra de Salud, Eidy Roca, quien atraviesa una situación médica crítica.