La exdirigenta del extinto Partido de Acción Nacional de Bolivia (PAN-BOL), Ruth Nina, recuperó su libertad la tarde de este miércoles, tras permanecer dos meses y 19 días detenida preventivamente en el penal de San Sebastián Mujeres, en Cochabamba. Su encarcelamiento fue consecuencia de las polémicas declaraciones que realizó durante un ampliado en Lauca Ñ, donde aseguró que en las elecciones del 17 de agosto “no se contarían votos, sino muertos”, lo que derivó en un proceso penal en su contra.
El momento de su salida estuvo marcado por una recibida festiva: con banda, guirnaldas y la presencia de algunos dirigentes vinculados al “evismo” en Cochabamba, quienes le expresaron su respaldo. Visiblemente emocionada, Nina declaró sentirse fortalecida tras la experiencia de privación de libertad.
“Me han encarcelado y amordazado, pero hemos resistido. Lo que no nos mata, nos hace más fuertes. Salimos más fortalecidos para luchar por todas las mujeres”, expresó la exdirigenta al dirigirse a la prensa.
Ruth Nina fue aprehendida el 24 de julio, luego de prestar declaración ante la Fiscalía, acusada por los delitos de instigación pública a delinquir, amenazas y obstrucción al proceso electoral. Desde ese día permaneció con detención preventiva, hasta que la Justicia le otorgó medidas sustitutivas, entre las que se incluyen detención domiciliaria con derecho al trabajo y el pago de una fianza económica, según confirmó su equipo legal.
La exdirigenta afirmó que aún no tiene claridad sobre su futuro político y que antes de asumir una decisión, priorizará el reencuentro con su familia y el diálogo con sectores sociales. “No sé lo que ha pasado en el país, necesito reunirme con mi gente para definir los pasos a seguir”, manifestó.