La estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) informó que desde ayer lunes y hasta el próximo 14 de diciembre se importarán 78.000 metros cúbicos (m³) de gasolina y diésel oil, un volumen que, según la empresa, permitirá garantizar el suministro de combustibles líquidos en todo el territorio nacional.
El anuncio se produce en un contexto marcado por el recrudecimiento de las filas para cargar diésel en varias regiones del país, situación que derivó en protestas y bloqueos de carreteras protagonizados por sectores del transporte, que incluso amenazaron con masificar las medidas de presión ante la falta de soluciones inmediatas.
De acuerdo con un comunicado oficial difundido por YPFB la tarde de este martes, el volumen importado “permite atender la demanda del mercado interno, sobre todo de diésel oil”, destacando que actualmente se observa una recuperación de los saldos, una mayor disponibilidad del producto y un incremento en la capacidad de cobertura operativa a nivel nacional.
La petrolera estatal señaló además que, frente a dificultades puntuales registradas en la comercialización de combustibles durante los últimos días, se activaron medidas operativas adicionales. Entre ellas, se incluyó la apertura de plantas de despacho en horarios y jornadas extraordinarias, con el objetivo de acelerar la distribución y normalizar el abastecimiento.
Según el detalle proporcionado por YPFB, del total anunciado se prevé el despacho de 30.000 m³ de gasolina y 48.000 m³ de diésel oil. Este esquema de coordinación, afirmó la empresa, permitirá dar continuidad a los despachos y a la comercialización del combustible en todo el país, con el respaldo adicional de importaciones provenientes de Argentina, Paraguay y Chile.
Pese a este anuncio, desde el lunes se registraron bloqueos y protestas en diferentes puntos estratégicos de los departamentos de La Paz, Cochabamba, Oruro y en la ciudad de El Alto. Los transportistas denunciaron que la distribución de diésel no se ha normalizado y que las operaciones siguen siendo insuficientes para cubrir la demanda.
En la ciudad de Oruro, el sector del transporte pesado advirtió que “no puede seguir esperando” ante los constantes retrasos en el abastecimiento y exigió al Gobierno una solución definitiva al problema. En Cochabamba, choferes del Transporte Libre realizaron cortes en rutas interdepartamentales, reclamando respuestas claras frente a la escasez de carburantes.
En Santa Cruz, también se reportaron protestas por la falta de combustible, acompañadas de extensas filas de vehículos varados en estaciones de servicio y dificultades para el ingreso de camiones cisterna a las refinerías, lo que agravó el escenario de desabastecimiento.
Ante esta situación, la Cámara Nacional de Industrias (CNI) emitió un pronunciamiento público en el que demandó al Gobierno un manejo transparente de la crisis y una comunicación clara hacia la población. “Es fundamental que se brinde información clara y precisa sobre el estado actual de la provisión de combustibles, permitiendo a los actores productivos y a la población tomar decisiones informadas”, señala el comunicado.







