El diputado disidente de Comunidad Ciudadana (CC), Marcelo Pedraza, cuestionó duramente los efectos colaterales del reciente incremento salarial decretado por el Gobierno, argumentando que este ajuste beneficiará también a los expresidentes de Bolivia, aumentando su renta vitalicia en aproximadamente Bs 30.000 por año. Pedraza aseguró que esta medida implica un gasto total de Bs 330.000 anuales, cubierto con recursos públicos.
La crítica del legislador surge tras el anuncio hecho el lunes 28 de abril por el presidente Luis Arce, quien oficializó un incremento del 10% al salario mínimo nacional y del 5% al haber básico para la gestión 2025. La decisión se dio tras una negociación con la Central Obrera Boliviana (COB) en la Casa Grande del Pueblo, con la participación del ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, y el secretario ejecutivo de la COB, Juan Carlos Huarachi.
Pedraza consideró «denigrante» que cada expresidente del país reciba un aumento de Bs 2.500 mensuales en su renta vitalicia, mientras el incremento al salario mínimo para los trabajadores bolivianos es apenas de Bs 250. En ese sentido, denunció que estas exautoridades no prestan ningún servicio al Estado y, sin embargo, siguen percibiendo beneficios financiados con el dinero de todos los bolivianos.
“El Estado está premiando a exmandatarios que ya no aportan al país, mientras el pueblo sigue haciendo sacrificios para sobrevivir”, sostuvo el parlamentario. Además, recordó que el año pasado presentó un proyecto de ley que propone la eliminación de la renta vitalicia para expresidentes, iniciativa que actualmente se encuentra paralizada en la Comisión de Constitución de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP).
Pedraza acusó a esta comisión de evadir sistemáticamente el tratamiento de su propuesta, evidenciando —a su juicio— una falta de voluntad política para acabar con lo que considera un privilegio injustificado.
El incremento salarial oficializado por el Gobierno establece que el salario mínimo nacional pasará de Bs 2.500 a Bs 2.750, y que el aumento del haber básico se aplicará de manera generalizada a todos los sectores laborales. El presidente Arce justificó la medida como una acción necesaria para mitigar el impacto de la inflación y la crisis internacional sobre el poder adquisitivo de las familias bolivianas.
Durante la conferencia de prensa, el mandatario afirmó que el ajuste fue diseñado para equilibrar la protección del bolsillo de los trabajadores con la estabilidad macroeconómica del país. “El Gobierno Nacional siempre va a precautelar el bolsillo de los más humildes”, aseguró Arce, agradeciendo a la COB por su “madurez” y comprensión del contexto económico nacional.
Arce también enfatizó que el aumento salarial responde a estudios técnicos y proyecciones económicas, y que forma parte de una política más amplia destinada a sostener el consumo interno y proteger la economía nacional en tiempos de incertidumbre.