La ministra de Salud, María Renée Castro, anunció que se han destinado tres millones de bolivianos para socorrer a las personas afectadas por los bloqueos que se han intensificado en diversas regiones del país. Durante una conferencia de prensa realizada la tarde del martes, la ministra lamentó que, a pesar de contar con los recursos y la capacidad necesaria para ofrecer atención médica, los bloqueadores impiden el paso de médicos, ambulancias y medicamentos, que son vitales para atender a heridos y enfermos que requieren atención urgente.
Castro hizo hincapié en la difícil situación que enfrentan los profesionales de la salud en su intento de proporcionar asistencia. «No nos permiten llevar dos tabletas, dos blísters de metformina a un paciente; no nos permiten llevar otros blísters de medicamentos antihipertensivos a los pacientes que tenemos que son hipertensos. Imagínense lo duro que es para nosotros tratar de llegar con alimentos», explicó. También destacó que lo que están viviendo es algo sin precedentes, ya que es inconcebible atentar contra el personal médico, persiguiéndolos y reteniéndolos.
El personal de salud que fue enviado a atender a la población ha denunciado haber sido retenido y amenazado. Informaron que les quitaron las mochilas y revisaron los botiquines que contenían pastillas, inyectables, jeringas y otros insumos necesarios para brindar atención. Castro recordó que el único interés del personal de salud al atender a un herido o enfermo es auxiliarlos y trasladarlos a un centro médico donde puedan recibir atención adecuada.
La semana pasada, en Parotani, también se restringió el acceso a la ayuda médica, y este martes, 29 de octubre de 2024, la situación se repitió en Mairana. Allí, se impidió el paso de ambulancias y personal médico, que intentaron evacuar a pacientes en condiciones críticas. Durante estos intentos, las ambulancias fueron apedreadas, y los médicos que intentaban cumplir con su deber se vieron perseguidos, lo que agrava aún más la crisis humanitaria generada por los bloqueos.
