Durante su homilía dominical, monseñor Stanislaw Dowlaszewicz, obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santa Cruz de la Sierra, hizo un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno para que este año destinen sus aguinaldos a los sectores más vulnerables, como los niños y ancianos en situación de abandono. El religioso señaló que, ante las limitaciones económicas que enfrenta el Gobierno central, este gesto sería un ejemplo de solidaridad en tiempos difíciles.
“Por este año, cuando no llega la plata del Gobierno central porque está yesca, podría ser un buen ejemplo de nuestras autoridades, asambleístas y concejales regalar a los niños y ancianos sus aguinaldos para que ellos gocen por un momento de su cariño”, expresó Dowlaszewicz durante la misa, subrayando la necesidad de enfocarse en los más desprotegidos.
El obispo también instó a reflexionar sobre el verdadero espíritu de la Navidad, en contraste con el consumismo que se evidencia en las luces, decoraciones y la venta de regalos. Hizo un llamado a no olvidar a los menores y personas de la tercera edad que, abandonados por sus familiares, pasan estas fechas en centros de acogida.
Monseñor Dowlaszewicz también criticó la falta de apoyo económico a los hogares de acogida, señalando que estos no han recibido recursos de las becas alimentarias que deberían proveer las autoridades municipales, departamentales y nacionales.
“Nuestros niños y ancianos en nuestros hogares ahora necesitan pan, medicina y no juguetes. Pareciera que los niños y ancianos no necesitan comer, no necesitan ser curados y no necesitan medicina”, denunció, destacando la urgencia de atender estas necesidades básicas.
