Un hombre de 38 años fue aprehendido por la Policía en Santa Cruz, acusado de distribuir material íntimo sin consentimiento, captado mediante cámaras de seguridad instaladas en diversos domicilios de la ciudad y otros departamentos del país. La detención se produjo tras una investigación que reveló la existencia de videos íntimos subidos a páginas web, lo que encendió las alertas de las autoridades.
El comandante departamental de la Policía en Santa Cruz, Rolando Rojas, explicó que el pasado 11 de mayo se detectó una actividad inusual en redes sociales vinculada a la difusión de estos contenidos. “Son videos que fueron subidos sin el consentimiento de las víctimas”, afirmó Rojas, señalando la gravedad de los hechos que vulneran la privacidad de numerosas personas.
Una vez identificadas las primeras víctimas y en coordinación con el Ministerio Público, se logró rastrear la dirección desde donde se compartían los videos. Este trabajo permitió ubicar una vivienda en inmediaciones del segundo anillo y avenida San Aurelio, donde el jueves se realizó un allanamiento que condujo al hallazgo de la computadora portátil utilizada para subir el contenido.
“En el lugar se encontró gran cantidad de material pornográfico almacenado, así como celulares y discos duros de gran capacidad, que también contienen presuntamente material de la misma índole”, detalló Rojas.
La investigación también reveló que el acusado administraba varios grupos de la plataforma Telegram, en los que compartía el material ilícito a cambio de dinero. Estas actividades indican que el detenido había convertido la distribución de pornografía en una actividad lucrativa y sostenida.
“Hizo de la comercialización de material pornográfico un modo de vida”, expresó el comandante policial, lamentando el daño causado a las víctimas y reafirmando el compromiso de la institución para combatir este tipo de delitos.
El caso continúa en investigación, y se analiza la cantidad total de víctimas afectadas, así como el origen de los equipos utilizados para las grabaciones. Las autoridades no descartan que existan más personas involucradas en esta red de distribución ilegal de contenido íntimo.
