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LAS FILAS EN LOS SURTIDORES PERSISTEN Y CRECE LA INCERTIDUMBRE: ANUNCIOS CONTRADICTORIOS SOBRE LA SOLUCIÓN

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La crisis de abastecimiento de combustible en Santa Cruz se mantiene pese a los anuncios de nuevas medidas para solucionar el problema. Las largas filas en los surtidores continúan, tanto en la ciudad como en áreas rurales, donde los conductores de camiones, micros y bidoneros se congregan desde tempranas horas del día con la esperanza de obtener algo de diésel o gasolina. La situación ha generado malestar e incertidumbre entre los usuarios, quienes ven cómo los anuncios de nuevos cupos de combustible no han logrado descomprimir la alta demanda.

Un claro ejemplo de esta situación se evidenció en el surtidor ubicado en el kilómetro seis de la doble vía a La Guardia, donde, desde muy temprano, una gran cantidad de vehículos se alinearon para abastecerse. Jorge, chofer de la línea 44, que cubre la ruta Balcón 2 y el mercado Mutualista, expresó su frustración por la persistencia de las filas, comparándolas con las que suelen verse durante bloqueos. “Anuncian soluciones, pero todavía no se nota. Ahora dicen que debemos esperar unos diez días. Es una burla”, afirmó.

El problema se complicó aún más con el anuncio del presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Armin Dorgathen, quien comunicó que el sábado llegó al puerto de Arica un primer buque con gasolina, el cual será enviado a Bolivia para intentar aliviar el desabastecimiento. Asimismo, mencionó que el domingo estaba prevista la llegada de otro buque con diésel, con lo cual se sumarían 40 millones de litros de combustibles adicionales. Dorgathen aseguró que para el miércoles las filas deberían estar prácticamente “en cero”.

Sin embargo, el presidente Luis Arce, durante el acto de conmemoración del aniversario del grito libertario de Potosí, agregó que la normalización de la provisión de diésel tardaría alrededor de diez días, ya que el plan diseñado tras los 24 días de bloqueos viales recién se activaría desde el miércoles, generando así más confusión en torno a los plazos.

Este mensaje ambiguo ha generado incomodidad en los sectores de transporte pesado de Santa Cruz, quienes señalaron la necesidad de mayor certidumbre. “Unos dicen hasta el miércoles y ahora el presidente habla de diez días. Se necesita certidumbre y no anuncios contradictorios”, criticó un dirigente del sector.

A pesar de las promesas, la población cruceña enfrenta el desabastecimiento a diario, observándose largas filas de vehículos en surtidores del quinto, cuarto y octavo anillo de la doble vía a La Guardia y de la Santos Dumont. También se han reportado filas similares en el surtidor Bioceánico, en la avenida Cristo Redentor, cerca del aeropuerto de Viru Viru, y en el sector entre el segundo anillo y la avenida Busch. Esta situación ha dejado a Santa Cruz con imágenes constantes de filas interminables, mientras los usuarios esperan soluciones concretas y efectivas.